México, DF.- Alrededor de 60 por ciento de las descargas de aguas residuales sin tratamiento van a parar a los ríos y arroyos del Estado de México, situación que los coloca como los espacios más dañados por esos líquidos contaminantes; en menor proporción se ubican suelos o barrancas y otros sitios no especificados con un 15 por ciento, de acuerdo con cifras del INEGI.En contraparte, sólo 39 de los 125 municipios mexiquenses realizan tratamiento de ese tipo de aguas, por lo menos en una mínima fracción de ese líquido, lo cual beneficia a la salud humana y al bienestar de los ecosistemas.
Al darse a conocer la Estadística Básica sobre Medio Ambiente, datos del Estado de México, por parte de la dirección Regional Centro Sur del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), se explicaron los rubros que abarcó el levantamiento de información, mismo que se hizo en los 125 ayuntamientos, en donde se destacó lo importante de preservar ese recurso natural que actualmente se encuentra "frágil", indicó el director de la dependencia, Miguel Ángel Vizconde Ortuño.
Al ofrecer un panorama completo de las temáticas en que se basó ese informe, el funcionario fue claro al decir que son siete las demarcaciones en que concentran el total de esas descargas: Naucalpan, Cuautitlán Izcalli, Nezahualcóyotl, Ixtapaluca, Cuautitlán, Capulhuac y Atlacomulco.
Ello pues representa 42 por ciento a nivel estatal e insistió que esas aguas contaminadas van a parar directamente a los torrentes o arroyos mexiquenses, los cuales son afectados, así como a los ecosistemas.
Acerca del tipo de tratamiento de aguas residuales, mencionó que ese procedimiento se usa en casi 40 municipios mexiquenses, los cuales representan cerca de 25 por ciento. Esta labor se realiza en 71 plantas.
En el estudio se analizaron otros tópicos como el caso de: Agua Potable y Saneamiento, servicios y captación de agua, así como un apartado dedicado a los hogares, enfocado al ahorro de agua y energía.
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