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martes, 3 de enero de 2017
HISTORIA DE LA SUCESIÓN GUBERNAMENTAL EN EL ESTADO DE MÉXICO (tercera de varias partes)
Desde que César Camacho Quiroz tomó posesión como gobernador interino del Estado de México, en julio de 1995, para sustituir a Emilio Chuayffet –quien había sido nombrado secretario de Gobernación por el presidente Ernesto Zedillo–, la lógica que ha imperado para ocupar el Palacio de Gobierno en Toluca ha sido la local.
Hasta 1993, habían llegado a la cumbre de la política estatal varias figuras que antes habían escalado posiciones en el ámbito federal.
A Jorge Jiménez Cantú lo hicieron candidato a la gubernatura del Estado de México en 1975, luego de ocupar la Secretaría de Salubridad y Asistencia en el sexenio de Luis Echeverría.
Alfredo del Mazo González hizo carrera en la Secretaría de Hacienda antes de ser postulado como candidato a gobernador durante el periodo del presidente José López Portillo.
Cuando Del Mazo fue llamado por el presidente De la Madrid para ocupar la Secretaría de Energía, en 1986, el interinato recayó en Alfredo Baranda, un cuadro formado en el Banco de México y Hacienda.
Mario Ramón Beteta fue secretario de Hacienda, director del banco Somex y titular de Petróleos Mexicanos antes de ser nominado como aspirante del PRI a la gubernatura en 1987.
Nacido en la Ciudad de México, a Beteta incluso tuvieron que justificarle la residencia en el estado para que pudiera ser gobernador. Se usó un alegato que alguien bautizó jocosamente como “jus ranchi”, pues Beteta poseía una propiedad rural en el municipio de Xalatlaco, del otro lado del Ajusco, que le había regalado Carlos Hank González.
De hecho, la falta de relación de Beteta con los grupos políticos del estado y la derrota que sufrió el PRI a manos de Cuauhtémoc Cárdenas en las elecciones presidenciales de 1988 hicieron que durara muy poco en la gubernatura: apenas dos años.
Del largo interinato posterior se hizo cargo Ignacio Pichardo Pagaza, quien había sido subsecretario de Hacienda, diputado federal, secretario de la Contraloría y procurador federal del Consumidor antes de ser enviado a Toluca por el presidente Carlos Salinas de Gortari para recuperar la fidelidad del estado al PRI.
Emilio Chuayffet hizo carrera local en el Edomex entre 1982 y 1987, cuando fue presidente municipal de Toluca y secretario de Educación de la entidad. Pero antes de eso había laborado en la Secretaría del Trabajo y había sido delegado en Benito Juárez, en la capital del país.
En 1989 sustituyó a Pichardo en la Profeco y luego se convirtió en director general del recién fundado Instituto Nacional Electoral. Cuando el PRI lo postuló para la gubernatura, en 1993, se desempeñaba como coordinador de asesores del secretario de Gobernación, Patrocinio González.
Hasta ese momento, quien llegaba al Palacio de Gobierno en Toluca tenía experiencia federal. Pero eso empezó a cambiar en 1995, con el nombramiento deCésar Camacho como gobernador interino.
Tanto él, como quienes lo sucedieron en la gubernatura –Arturo Montiel, Enrique Peña Nieto y Eruviel Ávila– hicieron su carrera en el estado.
Para ganar la candidatura, Montiel derrotó en una elección interna al avezado político Humberto Lira Mora, experimentado legislador, embajador y funcionario federal.
Enrique Peña Nieto es el primer Presidente de la República en no haber tenido funciones previas en el ámbito federal –Vicente Fox había sido diputado federal yFelipe Calderón, secretario de Energía–, pues hizo su carrera en el Estado de México, igual que Eruviel Ávila.
Fue quizá la lejanía del presidente Ernesto Zedillo respecto de los asuntos de su partido, así como la expulsión del PRI de Los Pinos, que duró 12 años, lo que fortaleció a la clase política mexiquense. Tanto, que incluso dio un Presidente.
Y hoy, aunque hay figuras del ámbito federal que son mencionadas como aspirantes a la candidatura del PRI a la gubernatura en 2017 –Luis Videgaray,Gerardo Ruiz Esparza, Alfonso Navarrete Prida, Ernesto Nemer y Alfredo del Mazo Maza–, la fuerza parece estar nuevamente en las filas del equipo local.
No parece casual que la senadora Ana Lilia Herrera –exalcaldesa de Metepec, exsecretaria de Desarrollo Social del estado y expresidenta estatal del PRI– pidiera licencia para integrarse al gabinete del gobernador Ávila en la cartera de Educación.
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