Jonathan Ruiz
Es cuestión de revisar cifras. El consumo de gasolina en la Ciudad de México sube, mientras que el de diésel, baja.
Pasa junto a mí. Es un camión de volteo que recogió piedras del tamaño de una sandía provenientes de un tremendo socavón que dará lugar a un nuevo centro comercial sobre el Periférico Sur. Muy cerca de la bandera de San Jerónimo.
De su escape sale además de estruendo, una evidente cortina de humo parecida a las polvaredas, e idéntica a la de un camión de transporte colectivo al mando de un temerario chofer que pisa a fondo y rebasa por la derecha para ganar pasaje. Ambos consumen diésel. Son los “villanos” de las calles, pero en términos ambientales su culpabilidad va en descenso.
Las cifras de venta de combustibles señalan que quienes nos movemos en automóvil, sea éste una “combi” o microbús, un taxi, Uber o un coche propio, todos consumimos más gasolina que el año pasado.
Enero y febrero fue clave. Justo al inicio de las contingencias ambientales durante el primer bimestre pudo circular prácticamente cualquier persona con automóvil, cortesía de la Suprema Corte de Justicia y de la corrupción en los Verificentros…
Así llegamos a la cifra de casi dos litros diarios de gasolina consumidos individualmente por los 8.8 millones de habitantes de esta ciudad. Cada uno de los primeros 60 días del año.
Eso cuenta a los bebés, a cada niña, niño, adultos, ancianos. Todos los que viven en esta ciudad y que seguramente abordan un vehículo a gasolina tarde o temprano. Cada día, cada uno, consumió 40 mililitros más de gasolina que el año pasado.
Pero, cosa rara: el consumo por persona de diésel en la ciudad bajó 60 mililitros. No deja de bajar año con año.
¿Los datos? Son 15.7 millones de litros de gasolina y 3.3 millones de diésel diarios los que queman los automóviles de esta ciudad. En el primer caso, 2.0 por ciento más; en el otro, 14 por ciento menos que el año pasado. Los datos son oficiales, del Sistema de Información Energética.
Íbamos bien. Desde 2012 hasta 2015 había bajado el consumo de gasolina en la ciudad. Pero circularon muchos más coches. El repunte no se limitó a esta superurbe. Pasó lo mismo alrededor: en el Estado de México, en Hidalgo, en Morelos y en Puebla. Todos rompieron rachas a la baja. Ahora, en 2016, todos consumen más gasolina, revelan esos mismos datos oficiales.
Y vienen más coches. En el DF cayó ligeramente la venta de autos al arranque de este 2016, pero en Morelos, en donde tú o tu vecino registraron su coche para no pagar tenencia, se vendieron 19 por ciento más coches en enero de este año que durante el primer mes de 2015.
En el Estado de México el aumento fue de 7.8 por ciento.
Los vendedores de coches celebran como párroco en Sábado de Gloria.
Versa, Vento, Tsuru, Aveo y Jetta, en ese orden, son los más vendidos este año en México. Festejan quienes los cobran: José Luis Valls, en Nissan; Andreas Hinrichs, de VW; y Ernesto Hernández, de GM. La coreana KIA no existía en el mercado nacional el año pasado y sólo en los primeros 60 días de 2016 vendió seis mil 256 vehículos.
En marzo se vendieron 116 mil 863 automóviles en México, un aumento de 11.4 por ciento respecto al mismo mes de 2015. Todos son datos de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores.
Queremos coches, los usamos más y ahí están las consecuencias. Tu coche Hoy No Circula.
Twitter: @ruiztorre
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