Rio de los Remedios estación más insegura de línea B del metro

Usuarios denunciaron que en varias ocasiones el convoy se queda detenido hasta por 20 minutos debido a que algunos jóvenes activan las palancas de seguridad que existen en los vagones

Ecatepec, México.- La Línea B del metro que comprende desde la estación Buenavista hasta Ciudad Azteca, ha presentado varias quejas desde hace años, pues los usuarios aseguran soportar a jóvenes que abordan los vagones sólo para ofender, mientras que los policías hacen como si nada pasara.

Carmen, residente de Nezahualcóyotl utiliza la estación Impulsora de dicha línea para ir de su casa al trabajo y viceversa, y asegura que decenas de usuarios de este sistema de transporte han denunciado la aparición de que diversos grupos de jóvenes que “se la pasan moneándose durante el día” y una vez que están completamente drogados, abordan los vagones de esta línea con tal de molestar a los pasajeros o manosear a las mujeres sin importar su edad”.

Otros usuarios de estaciones como Múzquiz, Río de los Remedios, Impulsora, Nezahualcóyotl, Bosques de Aragón y Oceanía, ubicadas en los municipios de Ecatepec, Nezahualcóyotl, constataron la presencia de ‘banditas’, las cuales “secuestran” los vagones durante varias estaciones, pidiendo una cooperación voluntaria a los usuarios, “si no quieren que les pasemos ‘báscula’ y nos quedemos con todo lo que traigan de valor”.

Asimismo denunciaron que en varias ocasiones el metro se queda detenido hasta por 20 minutos debido a que dichos jóvenes activan las palancas de seguridad que existen en los vagones.

La semana pasada Gabriel de 17 años de edad, se sumó a la larga lista de personas que son víctimas de la inseguridad en la zona oriente del Estado de México, pues abordó el tren en la estación Impulsora, a esa hora otras 15 personas viajaban en el vagón en dirección a Ciudad Azteca.

Cuando el convoy llegó a la estación Río de Los Remedios las puertas se abrieron, tres hombres ingresaron por la misma puerta y segundos después se distribuyeron por todo el vagón.

“¡Saquen todo lo que tengan, celulares, carteras, dinero. Esto es un asalto!” gritó uno de los tres tipos que iban armados. Los otros dos también llevaban arma y se la mostraron a los usuarios para intimidarlos.

La mayoría de los usuarios eran mujeres, quienes no opusieron resistencia al atraco.

Los pocos hombres que estaban en el vagón no intentaron desarmar a los tres ladrones de entre 30 a 35 años de edad por temor a recibir un balazo.

El robo se perpetró en menos de tres minutos, entre las estaciones Río de Los Remedios y Múzquiz.

Cuando el tren llegó a ésta estación, los tres delincuentes con el botín en sus manos, corrieron al abrirse las puertas. Se dirigieron a las escaleras, las subieron y salieron a la avenida Central para perderse entre las calles aledañas.

Antes de huir, les advirtieron a sus víctimas. “¡Si nos denuncian, regresamos a matarlos!”.

Gabriel recordara los malos momentos que pasó ese día, cuando su vida y la de los otros usuarios estuvo en peligro.