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martes, 22 de diciembre de 2020

¿Rozón…y?

 

 

La otra cara y rara Navidad en México





Por Fabián Jiménez N.

*Columna publicada en www.indicadorpolitico.mx

Durante las fiestas navideñas se hace aún más visible la situación de pobreza en la que vive una gran parte de la sociedad.

Sentir tristeza en Navidad es cada vez más habitual en tiempos de pandemia, y más con los tiempos de crisis que nos toca vivir en la actualidad. Al leer estas líneas, quisiera preguntarte si sientes tristeza en Navidad, o es al contrario. ¿Vives esas fiestas con gran alegría o crees que has perdido el espíritu navideño?

Este 2020 consagrado a lo improbable llegará a su fin con las fiestas navideñas más insólitas que se recuerdan. ni reencuentros numerosos, ni cenas de empresa, ni desfiles. eso sí, la recomendación general es que mejor celebrarla que dejarla pasar.

En el futuro, cuando recordemos el cruel 2020 y contemos cómo fue su Navidad, lo haremos con un sabor agridulce. Habremos puesto fin al año más terrible del que guardamos memoria y las copas brindarán por dejar atrás lo vivido y que llegue pronto la anunciada vacuna a cada hogar en México.

Religiosos y no creyentes, fanáticos del espíritu navideño e incrédulos de este culto, todos nos veremos contagiados, inevitablemente, por el clima emocional y alegre que flotará esos días en el ambiente, que siempre acaba suavizando al más reacio. Sin embargo, las insólitas condiciones en que las celebraremos, unidas por el sufrimiento que arrastramos desde marzo, harán que recordemos unas Navidades extrañas, las más raras de nuestras vidas.

A menos de escasos cuatro días para la Nochebuena, el esperado encuentro, la anhelada cena este año no serán como cada año y se deberá tomar las precauciones para cuidar a los seres queridos a quienes se extrañó todo este tiempo de restricciones y confinamiento y con los que se decidió pasar estas fiestas.

Nadie se atreve a pronosticar al detalle cómo van a ser las Pascuas del 2020. Imposible saber a estas horas si los viajeros podrán volver a sus localidades de origen para reunirse con sus familiares, cuántos podrán sentarse alrededor de una misma mesa o hasta qué hora estarán abiertas las tiendas para comprar regalos (Ciudad de México y el Edomex), cerraron sus establecimientos. Por no saber, nadie se atreve a descartar que el final del año coincida con un pico de contagios de covid-19 y tengamos que pasarlo confinados como la última Semana Santa.

En el mejor de los escenarios posibles, pocas tradiciones navideñas quedarán inmunes a la pandemia. No habrá fiestas de Nochevieja, ni comidas de empresa, ni fiestas multitudinarias. Los aficionados a cantar villancicos en coros tendrán que dejarlo para otra ocasión y en la mayoría de ciudades han quedado descartadas los desfiles de Reyes Magos.

Desde hace días, muchas de sus calles ven salir el sol cada mañana cubiertas de luces navideñas, pero a escasas jornadas del encendido oficial solo parecen ser el triste presagio de la Pascua que nos espera: la más desangelada de nuestras vidas.

Por difícil que nos resulte, tenemos que aceptar que la dichosa COVID-19 no va a desaparecer de nuestra vida de la noche a la mañana. Es momento de ser responsables y seguir las recomendaciones de la OMS y las Autoridades Sanitarias (mascarilla, higiene de manos y distancia social) para doblegar la curva e intentar recuperar la antigua normalidad cuanto antes.

Así es como estaré compartiendo con todos ustedes #MiColumnaDeHoy ¿Rozón…y?, y me pongo a sus órdenes en el sitio web: https://www.facebook.com/fabianjimeneznarvaez1, correo electrónico: fabianjimeneznarvaez@gmail.com, twitter: fabian7511, instagram: fabianjimeneznarvaez, y en la página de Facebook, me puedes encontrar como @Fajinar.

 

 

 

 

 

 

 

 

Cuautitlán intensifica las acciones para incidir en la mitigación de los contagios de COVID-19

 

 




 

 Por; ELIGIO GOMEZ ZBADILLO

 

CUAUTITLAN, Méx.- El gobierno municipal informó que ante el regreso al color rojo del semáforo epidemiológico por la pandemia del Virus SARS- CoV2 COVID-19 el gobierno de Cuautitlán intensifica las acciones para incidir en la mitigación de los contagios.

 

Entre las acciones emprendidas se encuentran los recorridos conjuntos que llevan a cabo elementos de seguridad pública, protección civil, Guardia Nacional y policía estatal quienes recorren calles y avenidas exhortando a la población a cumplir con las medidas de higiene, sana distancia y confinamiento que requiere la emergencia sanitaria que enfrentamos.

 

En tanto la Coordinación de Protección Civil y bomberos implementó un programa de desinfección con cuaternario de amonio e hipoclorito de sodio en espacios públicos y de alta concentración de gente, de igual manera se realiza la entrega de cubre bocas a los ciudadanos que permanecen o transitan en vía pública y que carecen de este artículo.

 

En este sentido elementos adscritos al área de proximidad social de la dirección de seguridad Pública recorren las distintas comunidades de la demarcación entregando volantes con información para la prevención de contagios.

 

De igual manera personal de la dirección de desarrollo económico recorre negocios y comercios para exhortar a este sector a cumplir con el acuerdo emitido por el gobierno estatal en cuanto al funcionamiento y apertura de negocios esenciales, en este sentido este lunes se hicieron ya las primeras suspensiones de actividades a comercios que se niegan a acatar la norma. 

 

Cabe recordar que de acuerdo con la gaceta de gobierno emitida el pasado 18 de diciembre de 2020 el semáforo epidemiológico rojo, permanecerá del 19 de diciembre al 10 de enero de 2021, con lo cual se prevé reducir la movilidad entre la población y frenar el acelerado aumento de contagios por el COVID-19

 

 

Cabildo de Coacalco aprobó por unanimidad el Proyecto de Presupuesto de egresos 2021

 

 




Por; ELIGIO GOMEZ BADILLO


COACALCO, Méx.-  El Cabildo de Coacalco aprobó por unanimidad el Proyecto de Presupuesto de egresos 2021, mismo que está basado en la asignación presupuestal necesaria para realizar y cumplir los objetivos establecidos en el Plan de Desarrollo Municipal vigente, así como los programas de cada área, todo ello en beneficio de la ciudadanía.

Durante la nonagésima sesión ordinaria de Cabildo, el alcalde Darwin Eslava afirmó que dicho proyecto está encaminado a lograr mejores resultados para el desarrollo del municipio y con ello impactar en la calidad de vida de las y los coacalquenses.

Cabe mencionar que a la fecha el Gobierno de Coacalco registra un avance importante en el cumplimiento de su Plan de Desarrollo Municipal, posicionándose como uno de los municipios con mejor desempeño en este rubro, hecho que fue reconocido por el Gobierno Estatal.

Por lo que el reto es que con el presupuesto 2021 se continúe con la ejecución de las líneas de acción planteadas por la actual Administración Municipal y que con ello los coacalquenses tengan mejores oportunidades de desarrollo.

En este sentido se informó que el  presupuesto definitivo se aprobará en los primeros meses del año 2021 y en él se priorizan las principales necesidades ciudadanas.

 

DIARIO MEXIQUENSE

 


En Coacalco se frustra robo a Coppel, dos delincuentes menos!!…






VIDEO: Presentación de la Coalición Va Por México.





PAN, PRI y PRD presentan su coalición Va por México para la elección federal de 2021

 A través de un evento virtual los partidos de oposición presentaron su coalición con la que participarán en la elección federal de 2021

 



  

Las dirigencias nacionales del Partido Acción Nacional (PAN), del Revolucionario Institucional (PRI) y de la Revolución Democrática (PRD) firmaron y presentaron la coalición parcial electoral en la que concurrirán en la elección federal del 2021 para la renovación de la Cámara de Diputados contra el presidente, Andrés Manuel López Obrador y su partido, Morena.

En conferencia de prensa virtual, los tres partidos recibieron el respaldo de distintos presidentes de organizaciones de la sociedad civil como Claudio X. González de Sí por México; Gustavo de Hoyos, de Alternativas por México; Demetrio Sodi de Futuro XXI, de Beatriz Pagés y de Luis Asalí, de Sí por México, entre otros que defienden a los niños con cáncer, a las mujeres víctimas de violencia, entre otros.

Esta alianza lleva el nombre de “Va Por México”; las letras son de color negro y en la X resaltan los colores azul del PAN; rojo del PRI y amarillo del PRD.

Este martes se publicó que todos los partidos políticos tienen hasta las 23:59 del próximo miércoles 23 de diciembre para presentar y suscribir coaliciones totales o parciales ante el Instituto Nacional Electoral (INE).

Este lunes, la Comisión Permanente de Acción Nacional aprobó, 40 votos a favor y 38 en contra de Damián Zepeda y Jorge Manzanilla, que su líder nacional, Marko Cortés suscriba y registre el convenio de coalición electoral parcial ante la autoridad electoral administrativa.

En el cónclave panista se autorizó que, con fundamento en el artículo 38, fracción III de los Estatutos Generales del PAN, “se autoriza el convenio de coalición electoral parcial con los partidos de la Revolución Democrática y Revolucionario Institucional para las diputaciones federales por el principio de mayoría relativa en el marco del proceso electoral federal 2020-2021.

“Se autoriza la postulación y registro como coalición de las candidaturas a diputaciones federales por el principio de mayoría relativa sigladas en el convenio de coalición suscrito”, define el segundo resolutivo del proyecto aprobado en la Comisión Permanente panista.

El pasado miércoles 16 de diciembre, EL UNIVERSAL publicó que la firma de una coalición parcial entre sí sería de aproximadamente 150 de los 300 distritos para la renovación de la Cámara de Diputados para el 2021, sin embargo, podrían llegar a ir juntos, de facto, hasta en 190 distritos en total, debido a las estrategias que está definiendo cada instituto político.

De saque, los 150 distritos se van a dividir en equidad, es decir, 50 para el PAN, 50 para el PRI y 50 para el PRD.

 

Se suman 225 cadetes a la Policía de Ecatepec y nombran a una mujer como subdirectora de la corporación















Un total de 225 jóvenes cadetes, en promedio de 26 años de edad y estudios de nivel medio superior, se incorporaron a la Dirección de Seguridad Pública y Tránsito de Ecatepec, tras concluir su capacitación en la Universidad Mexiquense de Seguridad.


Asimismo, el presidente municipal Fernando Vilchis Contreras, designó a Jaquelín Flores Sánchez  como subdirectora de Seguridad Pública y Tránsito municipal.



Vilchis Contreras aseguró que con esto se reforzarán las acciones realizadas en materia de seguridad pública, lo que permitirá continuar con la reducción de la incidencia en delitos de alto impacto, como robo de vehículo, a transporte de pasajeros y a transeúntes, entre otros.


El edil mencionó que Ecatepec presenta avances en la reducción de la inseguridad, lo que es consecuencia del equipamiento otorgado a la Dirección de Seguridad Pública y Tránsito municipal, la creación de diversas células de combate al delito y la incorporación de nuevos policías municipales, entre otras acciones.


Además de los 225 nuevos cadetes que se sumaron a la policía de Ecatepec, entregó equipo a la Célula de Búsqueda de Personas de la policía municipal y puso en marcha el Proyecto Jaguar, que contempla la instalación de mil 600 cámaras de viodevigilancia en 400 puntos de alta incidencia delictiva del municipio.


Roberto Hernández Romero, director de Seguridad Pública y Tránsito municipal, informó que los nuevos policías cumplieron con el curso de formación básica y reforzarán las diferentes áreas de la policía municipal, como regiones, cuadrantes y Centro de Mando para hacer frente a la delincuencia.


Aseguró que los nuevos policías tienen en promedio 26.3 años de edad y estudios de educación media superior, quienes iniciaron el curso básico en agosto pasado y concluyeron en diciembre, por lo que serán designados a tareas policiales de acuerdo a las necesidades operativas y de personal en las diferentes áreas que integran la corporación.


Actualmente Ecatepec cuenta con dos mil 665 policías, de los cuales mil 969 son hombres y 696 mujeres, a quienes se sumarán los 225 nuevos policías, quienes formarán parte de las 12 células y grupos especiales, lo que permitirá avanzar en el combate al delito.


Hernández Romero detalló que se hizo un análisis exhaustivo de cada uno de los candidatos a cadetes para garantizar que su expedienté esté limpio y puedan formar parte de la corporación. 


“Solicitamos un informe a la Subdirección Jurídico Administrativa, a la Coordinación Administrativa y a Plataforma México, además de la Contraloría Interna, a la Dirección de Administración y la Dirección Jurídica y Consultiva, para verificar que los candidatos no cuenten con impedimento legal, procesos o procedimientos penales, administrativos, o de ninguna otra índole, para que puedan continuar en el proceso de selección”., aseguró Hernández Romero.


Dijo que una vez que los candidatos a cadetes acreditaron los requisitos mencionados, se realizó el trámite de registro ante el Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el cual quedaron registrados como aspirantes a policías municipales de Ecatepec, por lo que posteriormente debieron acreditar el examen de control y confianza para formar parte de la corporación. 


"Una vez que se determinó que no contaban con ningún impedimento legal, con base en la información emitida por las áreas antes mencionadas, el aspirante fue evaluado por el Centro de Control de Confianza del Estado de México, y una vez que obtuvo la certificación, fueron propuestos para ser capacitados en el Curso Básico de Formación Inicial para Policía Preventivo"., expresó.


Los nuevos policías realizarán acondicionamiento físico en las instalaciones de la Academia Municipal de Policía de Ecatepec, donde también recibirán cursos como Derechos Humanos, uso de la fuerza, detención y conducción de personas, armamento, tiro y primer respondiente, así como capacitación en materia de intervenciones tácticas.

Ecatepec instala red de 400 kilómetros de fibra óptica para conectar mil 600 cámaras de seguridad con resolución 4k







Una red de 400 kilómetros de fibra óptica está siendo instalada en colonias y comunidades de Ecatepec para conectar las mil 600 videocámaras con tecnología 4K del Proyecto Jaguar, lo que convertirá a este municipio en el más vigilado del Estado de México.


El nuevo sistema de videovigilancia, denominado Proyecto Jaguar, contempla la instalación de 400 postes en puntos estratégicos del municipio, sobre todo en zonas de alta incidencia delictiva, cada uno con tres cámaras fijas y una móvil, todas de alta tecnología, así como botón de pánico y Wi-Fi.


En total serán mil 600 videocámaras conectadas a través de una red de 400 kilómetros de fibra óptica, que es tendida actualmente, además de que también será construido un nuevo Centro de Mando de la policía municipal, que se pretende certificar como C-5, todo con una inversión de 160 millones de pesos.


Este sistema de videovigilancia será único en el Estado de México por la cantidad de cámaras instaladas y por la tecnología de transmisión de imágenes de más de 4 mil pixeles por pulgada, lo que permitirá el reconocimiento inmediato de rostros y matriúculas de vehículos involucrados en ilícitos..


Actualmente el gobierno de Ecatepec opera una red de 60 videocámaras, por lo que con la instalación de los mil 600 nuevos aparatos el sistema de videovigilancia urbana crecerá dos mil 600%.


Los trabajos son realizados por la empresa Pireo, especializada en este tipo de tecnología, la cual fue constituida hace más de 10 años, con experiencia en la construcción  del C4 del municipio de Chalco.


Personal de la empresa, en coordinación con servidores públicos de Seguridad Pública y Tránsito y Tecnologías de la Información del gobierno municipal, llevan a cabo actualmente el tendido de la red de fibra óptica que enlazará cadda uno de los postes con el centro de mando local.

El maestro Hugo Salinas recuerda al generalísimo José María Morelos en el 205 aniversario de su sacrificio en Ecatepec








La historia en breve presenta: Aniversario Luctuoso de José María Morelos y Pavón 📜






José María Morelos

 



(José María Morelos y Pavón; Valladolid, actual Morelia, 1765 - San Cristóbal Ecatepec, 1815) Religioso, político y militar mexicano, caudillo de la independencia de México. Asumió el liderazgo del movimiento independentista tras la muerte en 1811 del cura Hidalgo (a cuya causa se había unido en 1810) y obtuvo importantes victorias. Con buena parte del sur del país bajo su control, Morelos trató además de dar forma política a sus ideales de justicia e igualdad a través del Congreso de Chilpancingo (1813), que formuló la declaración de independencia, otorgó a Morelos un amplio poder ejecutivo y puso las bases para una Constitución liberal y democrática que sería aprobada en 1814.

Nada de ello, sin embargo, fue duradero: reforzado con importantes contingentes de tropas, el

virrey español, Félix María Calleja, hostigó permanentemente al Congreso y al propio Morelos, hasta lograr su captura y ejecución a finales de 1815. Aunque la lucha por la independencia prosiguió, tras la muerte de Morelos inició un franco declive. Hubo que esperar seis años para que nuevas circunstancias históricas en la colonia y en la metrópoli aglutinasen al movimiento emancipador en torno a la figura de Agustín de Iturbide, quien, lograda la adhesión de amplios sectores sociales, nutrió un poderoso ejército que le permitió dominar rápidamente el país y proclamar la independencia de México (28 de septiembre de 1821).

Biografía

José María Morelos era hijo de Manuel Morelos, carpintero de ascendencia india, y de Juana María Pérez Pavón, una criolla cuyo padre había sido maestro de escuela en la ciudad. De sus primeros catorce años sólo se sabe que ayudó en lo que pudo al sostenimiento de la familia, y que la enseñanza de las primeras letras corrió a cargo de su madre.

La muerte del padre en 1779 significó un importante cambio. Confiado a la custodia de su tío Felipe Morelos, se trasladó a una hacienda cerca de Apatzingán (Michoacán) y se dedicó primero a la labranza y, poco después, a conducir como arriero una recua de mulas que su tío empleaba para transportar los ricos cargamentos de mercancías entre el puerto de Acapulco (terminal de los galeones de Manila) y la ciudad de México. Esta actividad le proporcionó unos ingresos regulares, que el joven Morelos empleaba en comprar mulas y en sostener a su madre y hermana.

Así vivió hasta cumplir los 25 años; en 1790, ante la insistencia de su madre, que deseaba su ingreso en la carrera eclesiástica con la ilusión de que accediese a una capellanía o beneficio dejado por su bisabuelo materno, José María Morelos se separó de su tío Felipe y regresó a Valladolid para ingresar en el colegio de San Nicolás. Allí tuvo ocasión de conocer a Miguel Hidalgo y Costilla, entonces rector del colegio, con el que coincidió durante dos años. Estudió gramática y latín y dos años más tarde amplió estos estudios en el Seminario Tridentino de la misma ciudad, recibiendo instrucción en retórica y filosofía. El 28 de abril de 1795 recibió el título de bachiller de artes en la ciudad de México.

Poco después solicitó de la jerarquía eclesiástica de Valladolid que se le confiriesen la tonsura clerical, las cuatro órdenes menores y el subdiaconato, lo que consiguió a finales de ese mismo año. En abril de 1796 aceptó una oferta del cura de Uruapan para enseñar gramática y retórica a los niños del lugar, tras recibir la licencia correspondiente. Tras algún tiempo de docencia, el 20 de diciembre de 1797, cumplidos los 32 años de edad, fue promovido al sacerdocio, otorgándosele licencias para celebrar misa, oír confesiones y predicar en Uruapan y en los curatos vecinos.

Se iniciaba así una larga carrera sacerdotal que lo llevaría a ejercer de cura párroco en varias localidades. Primero estuvo en un distrito marginado de Churumuco, etapa durante la cual falleció su madre en Pátzcuaro. Morelos permaneció en Churumuco durante poco más de un año, hasta que en marzo de 1799 se le transfirió a la parroquia de Carácuaro, a unos cincuenta kilómetros de distancia, tan pobre como la anterior pero mucho más poblada. En Carácuaro vivió Morelos toda una década, administrando la parroquia y viviendo de las aportaciones de sus feligreses, que se resistían por todos los medios al pago de los impuestos eclesiales.

Durante este periodo mantuvo y mejoró un negocio de ganado que había iniciado en su época de arriero, administró la herencia de su madre, transfirió a su hermana la casa familiar (actualmente Casa de Morelos en la ciudad de Morelia) y tuvo dos hijos ilegítimos; más tarde, durante el periodo revolucionario, tendría dos hijos más. En 1807 compró en Valladolid una casa a la que añadió un piso en 1809, sin que se tenga la menor certeza de que le llegara noticia alguna de que se estaba preparando una revolución. Bien es cierto que los historiadores señalan, en claro paralelismo con la trayectoria de Hidalgo, la creciente insatisfacción y en todo caso la frustración de Morelos, acumulada a lo largo de muchos años en el ejercicio de sus labores de cura parroquial.

El Grito de Dolores

El 16 de septiembre de 1810, con el llamado Grito de Dolores, Miguel Hidalgo prendió la mecha del largo proceso que conduciría a la independencia de México. Hidalgo estaba en realidad adelantando un plan que se había fraguado en Querétaro y que contaba con la participación de criollos importantes, entre ellos el mismo corregidor de esta ciudad, Miguel Domínguez.

Al ser descubiertos los planes de los conspiradores, Hidalgo se trasladó a Dolores, y allí dirigió a sus parroquianos un llamamiento a alzarse en armas contra las autoridades coloniales (el Grito de Dolores). La proclama tuvo un masivo seguimiento; en San Miguel el Grande unió sus tropas con las de otro de los conjurados de Querétaro, el comandante Ignacio Allende, y, ganando nuevas adhesiones por donde pasaban, a finales de mes habían ocupado ya las localidades de Celaya, Salamanca, Irapuato, Silao y Guanajuato.

En octubre de 1810, conocedor del levantamiento de Hidalgo, que había sido su rector en San Nicolás, José María Morelos decidió visitarle y hablar con él. Al parecer, su intención era ofrecerse como capellán, pero en el transcurso del encuentro, que tuvo lugar el 20 de octubre, Hidalgo lo convenció de que aceptara una misión más importante: marchar a la costa del sur, reunir tropas y tomar el puerto de Acapulco, que Morelos conocía muy bien. El 25 de octubre, acompañado de una veintena de voluntarios mal armados, Morelos partió de Carácuaro hacia las tierras calientes del sur, en calidad de lugarteniente de Hidalgo.

La actividad insurgente de Morelos duró cinco años, a lo largo de los cuales fue capaz de desarrollar cuatro campañas militares, además de una obra política, doctrinal y administrativa en la que se recoge un pensamiento avanzado, innovador y cargado de sentido popular y social. Se le reconoce además un incipiente genio de estratega militar, despiadado y cruel en algunas ocasiones, pero capaz de enfrentarse y doblegar en varias ocasiones a los ejércitos realistas superiores en número, bajo el mando del temible mariscal español Félix María Calleja.

Las campañas de Morelos

La primera campaña, de octubre 1810 a agosto 1811, le permitió organizar y constituir un cuerpo de tropas disciplinado y bien armado, con el que intentó sin éxito la ocupación de Acapulco en febrero de 1811. Se retiró con sus fuerzas a Tecpan, desde donde preparó el asalto a Chilpancingo el 24 de mayo y la toma de Tixtla (actual Ciudad Guerrero) dos días más tarde. En el curso de esta campaña se le unieron los hermanos Miguel y Víctor Bravo, nacidos en la hacienda de Chichihualco; Vicente Guerrero, oriundo de Tixtla, y Hermenegildo Galeana, de Tecpan. En esta época contó con la colaboración del estadounidense Peter Ellis Bean, aventurero cosmopolita que fabricó gran cantidad de pólvora para las tropas insurgentes.

Desgraciadamente, en junio de 1811 fueron ejecutados Miguel Hidalgo y sus principales ayudantes. El sucesor de Hidalgo en la dirección del movimiento fue Ignacio López Rayón, que se retiró a Zacatecas y se internó en Michoacán, mientras maduraba y concretaba un ideario político que diese coherencia y unidad a las iniciativas surgidas por todo el país. Junto con José María Liceaga (años más tarde compañero de Francisco Javier Mina) y José Sixto Verduzco (enviado de Morelos), López Rayón estableció en agosto de este año la Suprema Junta Nacional de América.

La mayor objeción que Morelos puso a esta Junta fue su declarado acatamiento de la autoridad del rey español Fernando VII (en ese momento prisionero de Napoleón), obediencia defendida por Rayón como una medida de prudencia y moderación. Éste fue, por lo tanto, el primer núcleo de gobierno insurgente, que se atrajo la simpatía de los intelectuales y hacendados criollos que deseaban establecer un sistema de Juntas similar al implantado en las provincias de España. En la ciudad de México se inició, en este tiempo, la formación de una sociedad secreta llamada Los Guadalupes.

En agosto de 1811 Morelos contaba, según sus propias palabras, "con cuatro batallones en pie de guerra: uno para proteger los puertos de la costa; otro en El Veladero, fuera de Acapulco; un tercero en Tixtla y el último en Chilpancingo, para encargarse del abasto de pólvora". Desde el primer momento Morelos se inclinó por la proclamación de algunos principios revolucionarios, tomados de sus conversaciones con Hidalgo.


José María Morelos

En Aguacatillo, el 17 de noviembre de 1810, había anunciado el establecimiento de un nuevo gobierno y en este decreto incluyó la abolición de la esclavitud (que confirmaría con solemnidad a principios de 1813), de los tributos y de las tesorerías de las comunidades. Este decreto está considerado como uno de los documentos más importantes en la historia social de América Latina. Como justificación de su levantamiento afirmaba que "ya que España se encuentra en manos de los franceses y los gachupines (españoles establecidos en América) conspiran con Napoleón para perpetuar su poder, todos los americanos deben unirse en defensa del país y de la religión".

La segunda campaña de Morelos, tras unos meses dedicados a la reorganización y preparación de sus huestes, se desarrolló de noviembre de 1811 a mayo de 1812. Una vez tomado Tlapa reunió a todas sus fuerzas en Chiautla para establecer una nueva estrategia: dividió su ejército en tres grandes cuerpos, uno al mando de Miguel Bravo, que marcharía hacia el sur y trataría de conquistar Oaxaca; el segundo dirigido por Hermenegildo Galeana, que atacaría y dominaría Taxco; y el tercero, bajo la dirección del propio Morelos, que avanzaría hacia el norte y entraría en Izúcar sin combatir el 12 de diciembre, para atacar Tenango y Tenancingo, antes de llegar a Cuautla (Morelos), ocupada el día de Navidad.

Se ha discutido acerca de por qué Morelos no siguió hasta Puebla, cuya conquista hubiera constituido el anticipo a la caída de la capital. En su lugar, dejando guarecida Cuautla, prefirió correr hacia el oeste, para unirse a las tropas de Galeana estacionadas frente a Taxco. Fue uno de sus más graves errores militares, porque mientras tanto Félix María Calleja, con un numeroso cuerpo de ejército, sitió Zitácuaro (Michoacán), residencia de la Junta de Ignacio López Rayón, obligando a sus miembros a huir y dispersarse sin ofrecer resistencia. Este fue el comienzo del declive de López Rayón y de sus seguidores y constituyó un duro golpe al inicial optimismo insurgente.

 

Al conocer la caída de Zitácuaro, Morelos regresó a Cuautla, vía Cuernavaca, dispuesto a resistir el asalto anunciado de Calleja. El sitio de Cuautla, que se prolongó de febrero a mayo de 1812, ha sido interpretado de manera diferente por los panegiristas de cada uno de los bandos. Inicialmente Morelos logró derrotar a Calleja, pero Calleja consiguió reforzarse con tropas de refresco.

Mientras los insurgentes se mostraban incapaces de organizar una fuerza exterior que atacase al jefe realista por la espalda, el agotamiento de los víveres, la falta de agua y el acoso de las epidemias diezmaron los efectivos de Morelos y le obligaron a organizar una salida arriesgada, que culminó con notable éxito. Tanto los insurgentes como el propio Calleja se atribuyeron el triunfo sobre sus contrarios, pero el sitio de Cuautla, de todos modos, constituyó un modelo de resistencia límite, que socavó y atemperó el triunfalismo del mariscal español.

La tercera campaña, de junio de 1812 a agosto de 1813, fue la de mayor actividad y de más rotundo éxito de Morelos. Reagrupadas sus fuerzas en Chiautla, con Galeana y Bravo, durante algunos meses dominó el eje Chiautla-Tehuacán, llevó a cabo diversas acciones contra las fuerzas realistas y trató de impedir las comunicaciones entre la capital y el puerto de Veracruz. Al llegar el mes de noviembre se decidió a tomar la ciudad de Oaxaca, lo que consiguió el día 25 de ese mes. Fue ésta una de las acciones militares más admirables de Morelos: con el apoyo de Mariano Matamoros y Miguel Bravo, logró derrotar a las tropas del general español González Saravia. La brillante victoria en Oaxaca reforzó la moral de los insurgentes, aumentó el prestigio personal de Morelos y produjo una gran cantidad de beneficios materiales.

Durante varias semanas Oaxaca fue el cuartel general de Morelos, que fortaleció y extendió su dominio de la zona, al tiempo que intensificaba su labor administrativa y el ordenamiento de la insurgencia. Creó la intendencia de la provincia y el ayuntamiento de la ciudad, expidió reglamentos relativos a los horarios comerciales, a la tenencia de armas, al toque de queda y al uso de una insignia de identificación personal. También creó una Junta de Protección y Seguridad Pública, responsable del orden y la seguridad del pueblo. En la fiesta de acatamiento a la Junta Suprema, Morelos se presentó vistiendo un uniforme nuevo con la insignia de capitán general, símbolo de aquel punto álgido en su carrera militar.

En aquel momento dudó entre penetrar en el Valle de México (como le pedían sus seguidores de la capital, asociados en la agrupación de Los Guadalupes) o ceder a una intuición que le señalaba la necesidad de apoderarse de un puerto de mar, para fortalecer sus relaciones con Estados Unidos y facilitar la llegada de ayudas procedentes del exterior. Inclinado por esta segunda opción, salió de Oaxaca el 9 de enero de 1813, atravesó la cordillera realizando marchas increíbles y, a partir de abril, estableció el asedio de Acapulco, que se prolongó durante varios meses hasta que, el 20 de agosto, consiguió su capitulación.

Pese al éxito, actualmente se piensa que, con esta decisión, Morelos perdió siete preciosos meses que hubieran podido inclinar el resultado final del lado de la insurgencia. De todos modos, con la conquista de Acapulco, Morelos controlaba un territorio que se extendía desde Guatemala hasta Colima, incluyendo la mayor parte de los actuales estados de Oaxaca y Guerrero, así como el sur de los de Veracruz, Puebla, México y Michoacán. En la ciudad de Oaxaca, a lo largo de casi todo el año 1813, se publicó, por iniciativa de Morelos, el periódico insurgente Correo Americano del Sur.

El Congreso de Chilpancingo

Mientras tanto se habían producido algunas novedades en el terreno político. Conocedor Morelos de las intenciones de Ignacio López Rayón de promulgar una Constitución americana, retrasó la contestación y, cuando lo hizo, pocos días antes de conquistar Oaxaca, le expresó sus objeciones principales: había que excluir definitivamente la mención a Fernando VII, limitar el número de consejeros de Estado y aceptar que la elección del propuesto generalísimo de la república fuese de por vida, sin más límites que "la incapacidad, la enfermedad o la edad de sesenta años". López Rayón no convirtió en ley su proyectada constitución, entre otras razones porque en la ciudad de México se había publicado y acatado públicamente la nueva Constitución española promulgada en Cádiz.

Mediado el mes de mayo, mientras sitiaba Acapulco, se le ocurrió a Morelos la idea de convocar un congreso nacional de representantes provinciales, como respuesta a las iniciativas de López Rayón. Después de solicitar a López Rayón que enviase a los miembros de su Consejo en Chilpancingo, donde serían "reelegidos o depuestos", dirigió un decreto a las provincias para que nombraran electores y los convocó a reunirse el 8 de septiembre, con la finalidad de elegir un nuevo congreso. Llegado el momento, redactó el texto conocido como Sentimientos de la Nación, que sirvió de base para las deliberaciones de los allí reunidos. En realidad, la mayoría de las propuestas, discursos y proclamas de Chilpancingo serían redactadas por Carlos María Bustamante, fiel seguidor de Morelos.

Instalado en Chilpancingo, Morelos formuló un plan de gobierno compuesto de 59 artículos, prácticamente un proyecto de Constitución. Reconocía el principio de la separación de poderes, pero proponía que el ejecutivo lo ejerciese un generalísimo elegido a perpetuidad y con derecho a proponer la legislación que considerase necesaria. El legislativo quedaría en manos de un Congreso de diputados, cuyas personas serían declaradas sagradas e inviolables, y se mantendría por el momento el poder judicial existente. El artículo 17 declaraba la independencia de España, sin hacer referencia a ningún monarca. Entre los miembros natos del Congreso se encontraban los miembros de la Junta Suprema de López Rayón.

El 14 de septiembre, una vez instalado el Congreso, Morelos leyó un discurso y los diputados iniciaron el examen de las propuestas contenidas en Sentimientos de la Nación. Al día siguiente fue elegido generalísimo por aclamación, con todos los poderes y la facultad de nombrar a sus lugartenientes, cargos que recayeron en Mariano Matamoros y Manuel Muñiz. Hubo que esperar durante algo más de un mes a que llegaran López Rayón, Bustamante, Liceaga y Cos, pero en noviembre se celebraron sesiones regulares y el día 6 el Congreso aprobó una declaración de independencia redactada por Carlos María Bustamante.

Su última campaña se desarrolló a partir de septiembre de 1813 y finalizó con su caída en Tesmalaca, en noviembre de 1815; si se atiende a toda la actividad desplegada en el Congreso de Chilpancingo, es obvio que esta fase final tuvo más contenido político que militar. Deseoso de conquistar Valladolid, porque entendía la necesidad de contar con una ciudad en la que establecerse, Morelos decidió su asalto, llegando a sitiarla a partir del 22 de diciembre de 1813. Pero los realistas, reforzados los últimos meses con la llegada de importantes contingentes de tropas, obligaron a Morelos a retirarse en confusa desbandada, lo que diezmó y desalentó a sus seguidores. De este modo se iniciaba la decadencia militar y política del líder insurgente, en una lenta agonía que se prolongaría a lo largo de casi dos años.

Félix María Calleja, que había sido nombrado virrey de Nueva España en substitución de Francisco Javier Venegas, aprovechó esta situación para ejercer presión en todos los frentes. Avanzó sobre Chilpancingo, lo que obligó al Congreso a emprender una marcha incesante que lo llevaría finalmente a la ciudad de Apatzingán, rumbo a Jalisco, donde acabó de discutirse y se proclamó el texto constitucional el 22 de octubre de 1814. Morelos, entre tanto, había renunciado al poder ejecutivo y dejó de ejercer mando militar alguno, excepto el de las tropas de su escolta.

De regreso a Acapulco, vivió momentos muy dolorosos al enterarse de la muerte de sus más fieles seguidores: Mariano Matamoros y Hermenegildo Galeana, los brazos ejecutores de su estrategia militar. Corriendo de un lugar a otro, medio escondido y rodeado de un escaso contingente de tropas, repelió a las fuerzas enviadas para capturarle, participó con fidelidad admirable en los trabajos del Congreso, mantuvo sus principios y discutió algunas de las medidas que pretendían tomar los dirigentes de la insurgencia.

A mediados de 1814 solicitó a su colaborador Peter Ellis Bean que se trasladara a Estados Unidos, en demanda de ayuda y armamento. Bean conoció al francés Joseph A. Humbert y, a través de éste, contactó con José Álvarez de Toledo, refugiado en Nueva Orleáns tras su fracaso de Texas. En mayo de 1815 Toledo escribió al Congreso, recibió un nombramiento de general insurgente en el exterior firmado por Morelos, y se ofreció para organizar una expedición en apoyo de la independencia. Cuando José Manuel Herrera, diputado que había sido presidente del Congreso en Chilpancingo, se trasladó a Nueva Orleáns junto con Toledo, se abrió una ventana a la esperanza insurgente.

El Congreso, mientras tanto, abandonó Apatzingán y se estableció en Uruapan, a la vez que elegía un nuevo poder ejecutivo tripartito integrado por Morelos, Cos y Liceaga. Obligado por su deseo de acercarse a un puerto de mar que le permitiera recibir la ansiada ayuda exterior, pero también por las disensiones y enfrentamientos de sus líderes, se decidió el traslado del Congreso a Tehuacán, encargándose Morelos de escoltar y defender a los integrantes del legislativo. Con la incorporación de Nicolás Bravo, el contingente militar se componía de un millar de soldados, la mitad de ellos armados. Sin embargo, llegados a Tesmalaca, seis millas más allá del río Mezcala (cerca de la actual Iguala), un destacamento realista al mando del coronel Manuel de la Concha cayó sobre el convoy y aprehendió a Morelos; Bravo logró escapar, y protegió el convoy hasta su llegada a Tehuacán.


Fusilamiento de Morelos

Conducido a la ciudad de México, el 22 de noviembre de 1815 se iniciaba el primero de la serie de juicios a que fue sometido, ya que las autoridades militar, eclesiástica y civil se disputaron el derecho a condenarlo. Incoado con toda rapidez, el primer juicio terminó el día 23 y enseguida se presentó al prisionero ante el temible tribunal de la Inquisición, que lo incriminó por abandono de las doctrinas de la Iglesia y la adopción de herejías de autores malignos. El juicio estatal se celebró el día 28; la declaración de Morelos ante el tribunal, registrada y anotada por él mismo, constituye una de las fuentes de información más valiosas sobre el movimiento de independencia. Dictada la sentencia de muerte, el 22 de diciembre cayó fusilado.

 


CCV Aniversario luctuoso de José María Morelos y Pavón

 

 











 

El 22 de diciembre se cumple un año más del aniversario luctuoso de uno de los hombres que participaron en la guerra de Independencia su nombre José María Morelos y Pavón.

Ante esto, se hace una crónica desde el momento de su aprehensión hasta que fue ejecutado en el Estado de México en 1815. 

“Tenía 50 años cuando cayó en manos de los realistas; llevaba poco más de cuatro años en pie de guerra; había tenido triunfos militares nada despreciables, pero ninguno como para inclinar la balanza a favor de la insurgencia. Cuando José María Morelos y Pavón fue capturado el 5 de noviembre de 1815, estaba completamente quebrado”, resalta.

La crónica de aquellos días indica que “una vez que Morelos cayó en manos de las tropas realistas fue conducido a la Ciudadela. Lo esperaban el proceso militar y el inquisitorial. Durante los días que transcurrieron entre el cinco de noviembre –día en que fue capturado- y el 22 de diciembre de 1815 –fecha en que fue fusilado-, Morelos mostró un rostro muy humano: se doblegó ante los interrogatorios y ante la posibilidad de que no alcanzara el perdón de la iglesia y muriera en pecado”.

Los jueces percibieron que el estado anímico de Morelos estaba quebrado. Así que lo atormentaron con el temor de la condenación eterna y lo doblegaron.

Morelos confesó la existencia de sus hijos y la relación con varias mujeres a pesar de ser sacerdote.

Aunque unas de sus confesiones llamaron la atención, aceptó que entró a la guerra de Independencia solo por seguir a Hidalgo; además informó a los realistas dónde se encontraban las armas de los insurgentes, delató a sus compañeros, les señaló las zonas en donde se movían, quiénes y cuántos eran.

Morelos fue conducido a las cárceles de la Perpetua para ser acusado de traición al rey y “mucho más traidor a Dios”, siendo juzgado por la Inquisición.

Del 25 al 27 de noviembre de 1815 el tribunal juzgó a Morelos y lo condujo al extremo de la humillación al degradarlo en un auto público de fe:

“Luego que se terminó la lectura de la causa –escribió Lucas Alamán-, el inquisidor decano hizo que el reo abjurase de sus errores e hiciese la protesta de la fe, procediendo a la reconciliación, recibiendo el reo de rodillas azotes con varas... Morelos tuvo que atravesar toda la sala del tribunal con el vestido ridículo que le habían puesto y con una vela verde en la mano...” señala WikiMéxico.

Aunado a ellos destaca “con los ojos bajos, aspecto decoroso y paso mesurado, se dirigió al altar, allí se le revistió con los ornamentos sacerdotales y puesto de rodillas delante del obispo, ejecutó éste la degradación por todos los órdenes, según el ceremonial de la iglesia. Todos estaban conmovidos con esta ceremonia imponente; el obispo se deshacía en llanto; sólo Morelos, con una fortaleza tan fuera del orden común que algunos la calificaron de insensibilidad, se mantuvo sereno”.

Durante el acto de degradación Morelos dejó caer alguna lágrima y es que era la primera vez desde la conquista, que este terrible acto se efectuaba en México.

La mañana del 22 de diciembre de 1815, Morelos fue sacado de su prisión en la Ciudadela por el coronel de la Concha y fue trasladado en carruaje hacia el norte de la ciudad de México, en dirección hacia la Villa de Guadalupe.

En la capilla del Pocito, en el cerro del Tepeyac, Morelos pidió permiso para detenerse un momento; bajó del coche, se arrodilló y rezó un momento. Luego continuaron el viaje hasta San Cristóbal de Ecatepec, a donde llegaron cerca de la una de la tarde.

Morelos todavía tuvo ánimo para una última comida: probó un caldo con garbanzos y luego se fumó un puro de hoja. Cuando las campanas anunciaron las tres de la tarde, Morelos supo que había llegado el momento, se puso de pie y le dijo al oficial realista: “No nos mortifiquemos más, vamos señor Concha, venga un abrazo”.

Morelos se negó a que le vendaran los ojos; lo pusieron de rodillas y con un crucifijo en la mano dijo: “Señor, si he obrado bien, tú lo sabes; y si mal, me acojo a tu infinita misericordia”. Una sola descarga acabó con su vida. Su cuerpo fue sepultado de inmediato. 

 

 

Sigue en CDMX saturación, pese a semáforo rojo y las camas extra

 

La capital se mantiene en el primer lugar nacional en el número de personas hospitalizadas con un 85 por ciento.




Claudia Sheinbaum, jefa de gobierno de la CDMX

La Ciudad de México, pese a estar en semáforo rojo y haber ampliado ya el número de camas de hospitalización para COVID-19, registró un incremento de 0.5 por ciento en el número de personas hospitalizadas por la enfermedad.

De hecho, la capital se mantiene en el primer lugar nacional en el número de personas hospitalizadas con un 85 por ciento, reportó el gobierno federal en su conferencia vespertina para el tema COVID-19.

 “La Ciudad de México tiene la mayor ocupación de camas generales con 85 por ciento”, dijo José Luis Alomia, director de Epidemiologia de la Secretaría de Salud. Señaló que ese 85 por ciento se ha mantenido en los últimos días “porque la velocidad de la reconversión y la expansión ha permitido, día con día, estar sumando camas”.

Antes, en conferencia, la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, reveló que en las últimas 24 horas en la capital hubo 173 nuevas hospitalizaciones, al pasar de 5 mil 039 el domingo a 5 mil 212 el lunes.

En el caso de camas generales hubo 90 nuevas hospitalizaciones y en camas con ventilador fueron 83 nuevos ingresos. Reveló que ya está en marcha la ampliación de la capacidad hospitalaria, que se prevé alcance las 7 mil camas y reiteró el llamado a la ciudadanía a seguir las cinco reglas básicas para evitar la propagación del COVID-19, entre ellas quedarse en casa, usar cubrebocas y mantener sana distancia, no acudir ni realizar fiestas, posadas o reuniones familiares.

A nivel federal, Alomia reportó 396 nuevas muertes por COVID-19, con lo que suman ya 118 mil 598 defunciones. Además, hubo 5 mil 370 nuevos casos confirmados. Hay 81 mil 967 casos activos.

Señaló que a nivel nacional había hasta el 20 de diciembre 17 mil 346 camas ocupadas (46 por ciento), cifra que es apenas 5 por ciento menor a la del nivel máximo alcanzado en la pandemia, que fue de 18 mil 223, durante la semana 28.

Alomia recordó que tres estados (Baja California, Estado de México y Ciudad de México) están en semáforo rojo, 24 entidades están en naranja, tres en amarillo. Sólo dos (Chiapas y Campeche), en verde.

Advirtió que otras seis entidades tienen tendencia ascendente a color rojo si no se atienden las medidas de prevención. Son Zacatecas, Sinaloa, Guanajuato, Querétaro, Aguascalientes e Hidalgo.

Dijo que en esta semana 50 la positividad tuvo un incremento del 1 por ciento en relación con la semana previa, al pasar del 39 a 40 por ciento.

 

Tecámac continua con la rehabilitación de sus calles

 








Después de que 4 trabajadores de uno de los dragones dieron positivo a Covid y ya fueron dados de alta, reanudamos los trabajos de rehabilitación de las calles de San Martín Azcatepec en las avenidas Jorge Jiménez Cantu y Hugo Cervantes del Río.

Les comparto también los avances en Loma Bonita, calles Aguascalientes y Oaxaca y también en San Pablo Tecalco, calle Dionicio Díaz.

Servir y transformar es nuestra misión.

 

Doctora Brenda Alvarado directora general del TESE te desea un 2021 lleno de salud y bendiciones


 

Hasta septiembre de 2020 Edoméx tenía una deuda y obligaciones por 52 mil 250 millones de pesos

 

 

 



 

El último reporte del Sistema de Alertas de las entidades arrojó que el 87% de las entidades federativas presenta un nivel de endeudamiento sostenible hasta el 30 de septiembre, es decir, de rango bajo.

De acuerdo con el Centro de Finanzas Públicas, el Estado de México, como la mayoría de las entidades, tiene un nivel sostenible de endeudamiento.

Aun cuando se refiere que la entidad mexiquense hasta septiembre tenía deuda y obligaciones por 52 mil 250 millones de pesos, por sus altos ingresos que superan los 300 mil millones de pesos su nivel de endeudamiento es sostenible.

Sistema de Alertas

El Sistema de Alertas es un mecanismo de evaluación de los niveles de endeudamiento de las entidades federativas, los municipios y los entes públicos.

Los tres rubros que se miden son: Deuda Pública y Obligaciones Sobre Ingresos de Libre Disposición, el Servicio de la Deuda y Obligaciones sobre Ingresos de Libre Disposición y Obligaciones a Corto Plazo y Proveedores y Contratistas menos los montos de efectivo, bancos e inversiones temporales, sobre Ingresos Totales.

Lo que se mide

El primer indicador relativo a la Deuda Pública y Obligaciones como proporción de sus Ingresos de libre disposición está vinculado con la sostenibilidad de la deuda del ente público. Se contabiliza el saldo de créditos contratados por el ente público (tanto la deuda de largo plazo como las obligaciones de corto plazo), emisiones bursátiles, deuda en la cual el ente público otorga su respaldo mediante una fuente de pago propia, obligaciones derivadas de Asociaciones Público-Privadas (contabilizando únicamente la parte de la inversión), y cualquier otra que implique pagos financieros programados.

Los Ingresos de Libre Disposición incluyen los ingresos locales más las participaciones federales y en el caso de las entidades se restan las participaciones federales otorgadas a los municipios.

El segundo indicador es sobre Servicio de la Deuda y Obligaciones como proporción de sus Ingresos de libre disposición, vinculado con la capacidad de pago. En la medición del servicio se contabilizan las amortizaciones, intereses, comisiones y demás costos financieros derivados de los Financiamientos y Obligaciones, excepto las amortizaciones realizadas de manera anticipada.

El indicador tres señala obligaciones a corto plazo y proveedores y contratistas, menos los montos de efectivo, bancos e inversiones temporales como proporción de sus ingresos totales, indicador vinculado con la capacidad financiera del ente público para hacer frente a sus obligaciones contratadas a plazos menores de 12 meses.

En este indicador se contabilizan los adeudos del ente público con proveedores de bienes y servicios, contratistas por obras públicas y financiamientos que deben ser liquidados en un plazo menor a 12 meses. Los ingresos totales se definen como los de libre disposición más las transferencias federales etiquetadas.