La violencia política que se ha desatado en gran parte del
país durante las campañas electorales es muy preocupante, incluyendo la
agresión verbal de líderes políticos, aseguró el Cardenal y obispo emérito de
San Cristóbal de las Casas monseñor Felipe Arizmendi Esquivel.
Aunado a esto, señaló que dicha violencia no es más que el
reflejo del deterioro de los valores tradicionales del pueblo puesto que la
descomposición de la familia, la ausencia o carencia de un padre responsable y
trabajador, la necesidad de una madre de salir a trabajar y dejar solos a sus
hijos son algunas causas de este fenómeno.
Aunque a ello, dijo, se suman la falta de trabajo, agravada
por la pandemia, el alejamiento de Dios y de la Iglesia, la pobreza de muchos y
la ambición de ganar dinero matando o extorsionando.
Arizmendi Esquivel, mencionó que, si bien los pastores de la
Iglesia invitan a la feligresía a vivir otros valores, muchos no hacen caso por
lo que lamentó que obedezcan a sus líderes asesinos y a jefes de grupos
criminales que amenazan a sus miembros de obedecer sus órdenes criminales o de
lo contrario pagar con su muerte o la muerte de algunos de sus familiares.
Hay muchos casos donde quienes asaltan y matan, son
presionados por sus jefes criminales.
Ante esta situación, indicó que el pueblo debe dejar guiarse
por Dios, recomponer a las familias, educar para un trabajo digno, que los
hijos no siempre vean satisfechas sus exigencias, sino que sepan vivir en la
noble austeridad.
Finalmente, aclaró que las máximas autoridades civiles deben
intervenir y usar la tecnología virtual para detectar a los criminales e
impedir que sigan dañando a la comunidad.
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