El Estado de México y Puebla encabezan la lista de más casos de linchamientos en el país, desplazando inclusive a la Ciudad de México. Estas tres entidades suman 748 de los 1,206 casos identificados en los últimos tres años, le siguen Oaxaca, Morelos, Chiapas e Hidalgo.
Investigadores universitarios consideran que estos sucesos son más frecuentes donde existen altas tasas de delincuencia que afectan directamente a grupos sociales de recursos medios y bajos, y son acompañados de altos niveles de impunidad, sentimientos de inseguridad, indignación y falta de confianza en la actuación de las autoridades policiacas y de administración de justicia.
Norma Ilse Veloz Ávila y Raúl Rodríguez Guillén, investigadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), advierten que el aumento de los linchamientos en el país pone en el centro del debate la necesidad de tipificarlos como delito y con ello poder castigar a aquellos que participen en su tentativa o consumación.
Subrayan la urgencia de atender estos fenómenos sociales en los municipios para buscar las causas que ofenden a la sociedad en general y que hacen propicio el ambiente para que se den los linchamientos.
Subrayaron que el incremento alarmante de estos sucesos de inconformidad social en México, registrado en los últimos años a lo largo y ancho del país, obligan a las autoridades municipales, estatales y federales a buscar líneas de estudio que contribuyan a la prevención del fenómeno.
Los profesores del Departamento de Sociología de la UAM, exponen que aunque han existido esfuerzos previos fue a partir de la primera década del siglo XXI que el tema empezó a cobrar importancia en la agenda del análisis de la violencia social y política.
Veloz Ávila y Rodríguez Guillén afirman que no ha habido un año sin un linchamiento consumado o intento, ni entidad federativa que no haya sido escenario de alguno. Las cifras antes mencionadas dan una idea de la gravedad del asunto.
Desde 1994 ha habido acciones por conocer y explicar esta modalidad de violencia urbana y sus alcances, en términos sociales, políticos y jurídicos, ya que antes era un asunto marginal que se perdía en las páginas de la nota roja en la prensa, afirman los académicos universitarios.
Por ultimo señalaron que su investigación está basada en artículos y aportaciones de autores como Carlos Vilas, Antonio Fuentes, José Luis Soberanes y Carlos Monsiváis, sobre el tema de linchamientos en México, y un recuento realizado en fuentes periodísticas impresas y electrónicas, en los últimos tres años, donde se registraron al menos 1, 206 casos en todo el país.
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