El obstetra calificó dicho panorama como "alarmante", toda vez que se calcula que la primera relación sexual en adolescentes es entre los 13 y 14 años, y la mayoría no utiliza un método de planificación familiar, pues únicamente lo usan tres de cada 10 jóvenes.
Acerca de la carencia de protección durante el contacto sexual, destacó que es un riesgo importante o grave y no sólo por la posibilidad de quedar preñada, sino por las enfermedades de transmisión sexual que a la larga desencadenan una calidad de vida baja, lo cual es un panorama devastador.
El especialista recalcó que aunado a esos problemas de salud, se encuentra el riesgo de muerte de la futura madre de familia al tratar de abortar, o bien, por complicaciones durante la concepción, tal es el caso de preeclampsia o hipertensión, padecer de hemorragias y otras dificultades por no atenderse médicamente.
En ese contexto, el peligro no es sólo para la próxima mamá sino para el bebé, debido a que evitan al médico porque son presas del estigma social por embarazarse a temprana edad.
Ante dicho panorama de prevalencia de embarazos en adolescentes, manifestó que hace falta educación acerca del control natal, a pesar de las campañas de planificación familiar que han sido fuertes, pues los jóvenes saben cómo utilizar el condón y otros métodos, incluso "nos dan clases de cómo funcionan y se usan, pero falta dar ese paso".
Recomendó a ese grupo de la población solicitar información de planificación familiar, pues es gratuita en el sector salud, donde les imparten pláticas, seguimiento y control de la sexualidad con responsabilidad.
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