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miércoles, 26 de septiembre de 2012

Editorial

Ecatepec: pobreza extrema y delincuencia

Todos somos culpables

Los hechos y las estadísticas son claras y precisas, Ecatepec está entre los municipios del país con mayores problemas sociales que se ven reflejados en alta delincuencia, donde lo mismo es común escuchar de atracos a los pasajeros de transporte público como la ejecución de individuos que se deduce tienen como actividad principal delinquir en lo que ahora llaman coloquialmente como el crimen organizado ó también zonas de pobreza extrema aunque se pretenda decir lo contrario.

Culpar a las corporaciones policiacas de éste problema no tiene sustento; precisar más no acusar a las instancias de gobierno ya sea municipal, estatal ó federal que las alternativas de incorporación a las actividades productivas ó las ofertas laborales o educativas están lejos de ser realidad para los ciudadanos residentes en esta zona es una realidad.

Indicar a quienes tienen la función de promover el desarrollo económico para generar una mejoría en el nivel de ingreso, también se justifica.

Señalar que como consecuencia de estos dos aspectos los problemas sociales se ha recrudecido y estamos al bordo de una gran descomposición social está sustentado.

Por eso, el Consejo Editorial de MEXIQUENSE, en una autocrítica también se cuestiona la carencia de profundidad en nuestras notas informativas donde de manera irresponsable, de manera indirecta proyectamos insulsos programas sociales que no solventan ni ayudan a resolver las diferencias y carencias económicas que enfrenta la población.

La pasividad, también es irresponsabilidad; la carencia de veracidad es sintomático de carencia de valores; informar para desinformar es indolencia y publicitar por el simple hecho de hacerlo es apatía.

Por eso, ciudadanos, autoridades, instituciones educativas y prestadores de servicios, sumados a ellos los medios de comunicación, tenemos que buscar unidos, las alternativas que permitan un mejor desarrollo económico, político y social, de nuestras comunidades.

La pobreza extrema y la delincuencia, no son términos que deben olvidarse, porque son consecuencia, de malos gobiernos, de ciudadanos apáticos y de medios de comunicación vacíos.

No es el interés con éste posicionamiento de MEXIQUENSE de acusar y denostar sin metas y sin objetivos.

Nosotros, al igual que todos los que tenemos nuestro hogar en éste país, en esta entidad y en éste municipio simplemente aspiramos a vivir humanamente bien.

Ante ello ofrecemos está expresión que es un compromiso tenemos que cambiar y acabar con la apatía actuando con gran responsabilidad, con una mente abierta y positiva.

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